Hoy lunes Joaquín, mi chico, abre al público su nuevo restaurante italiano que se llama Oven Mozzarella Bar, en la calle Fuencarral 74, pero el sábado él y su socio, que es su hermano Paco, lo inauguraron solo para amigos. Esta es una forma de rodarlo un poco antes de abrir al público y de supervisar los últimos retoques en la presentación de los platos y nosotros los amigos pues encantados de “hacerles el favor” de ir a ponernos morados probando toda la carta.
A mí la burrata me encanta y tienen varias. Nos trajeron para probar además de la que siempre había probado con tomate, otras con ventresca, con panceta, y una última que me encantó con salmón.
De momento íbamos bien pero ahora llegaba la prueba de fuego conlas pastas y las pizzas. Estas últimas las hacen en un horno de leña y sólo tardan tres minutos en hacerse pero nos explicó la chica que nos tomó nota que la masa la hacen y la dejan reposar tres días antes de utilizarla porque así no fermenta en nuestro estómago y no nos sentimos tan pesados al terminar. Esto era la teoría que nos contaron pero ahora ya por experiencia propia os digo que después de comerme más de una pizza entera yo sola (uff, lo de la operación bikini un desastre…), es verdad que no me sentía llenísima ni tardé toda la noche en hacer la digestión como suele pasar.
Por si os apetece ir a probar este nuevo restaurante os digo que todas las pizzas que probamos estaban muy buenas pero una con huevo y trufa es espectacular.
Las pastas también nos gustaron mucho pero hay una que os recomiendo, Tortelli Zucca, pasta rellena de calabaza con foie y reducción de balsámico, impresionante!! Y eso que como ya he comentado en algún otro post, a mí el foie no me gusta pero lo aparté sin problema para alegría de los que estaban a mi lado, que se lo comieron encantados y aún así para mí estaba buenísimo aunque supongo que para ellos que sí les gusta debía estar todavía mejor.
Es para matarme pero el plato estrella que son las pizzas y con el hambre que tenía y la buena pinta cuando llegaron, ni pensé en hacerles una foto, solo tenía mi mente en elegir por la que iba a empezar y me acordé cuando ya no quedaba ni una porción.
El postre fue una tarta de chocolate rica rica que os enseño. Nos dijeron amigos que estaban en la mesa de al lado que el tiramisú y la tarta de dulce de leche que se acabaron ellos porque ya no nos quedó ni un trocito para probar que estaban de muerte. No hace falta que lo juren porque acabaron con las existencias!!
Como veréis no miento cuando digo que nos pusimos las botas a comer y que hoy me espera un pollo a la plancha con ensalada para compensar pero de vez en cuando hay que saltarse la operación bikini y disfrutar.
Gracias, Joaquín y Paco, por invitarnos a cenar y como el boca a boca es lo que mejor funciona, yo estoy segura que todos los que estuvimos vamos a recomendar a Oven como uno de los mejores italianos de Madrid.
Me encantó reecontrarme con mi gran amigo Pablo del Pozo, quien empieza una nueva aventura en el mundo de la televisión y le deseo toda la suerte del mundo porque se lo merece como gran profesional que es. Y también les deseo a David, uno de los protas de ”Hoy No me puedo Levantar” y a Dani, actor y bailarín del mismo musical que acaba de terminar, que muy pronto estén de nuevo encima de un escenario. Y por supuesto a Maria, con quien coincidí en una gala benéfica de TVE y no puede ser más curranta, que su andadura en la publicidad siga siendo un éxito.
Me despido ya de este post dejándoos la carta del restaurante para que le echéis un ojo y deseando hacer ya esta misma semana o la que viene como muy tarde la foto para el cartel de la nueva obra de teatro que empiezo a ensayar en agosto. Por supuesto, que os enseñaré el making of de la sesión de fotos a ver si os gusta el resultado.
Que tengáis una feliz semana y soñéis con mucha fuerza vuestras ilusiones porque se cumplen!!